Para evitar que lleguen los desechos a la presa El Capulín, y contribuir al cuidado del medio ambiente y de la salud de la población, el gobierno municipal de Huixquilucan concluyó la instalación de seis redes retenedoras de basura, aguas arriba del río San Joaquín.
La alcaldesa Romina Contreras Carrasco informó que dichas acciones forman parte de los compromisos que mantiene su administración con los vecinos del fraccionamiento La Herradura para sanear la presa.
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¿Qué hicieron para prevenir problemas de salud para los vecinos de la presa El Capulín?
La nueva obra consiste en la instalación de seis módulos de barreras retenedoras de sólidos de tres metros de largo cada una, las cuales están diseñadas para adaptarse al flujo del agua y detener los residuos sólidos para evitar que lleguen a la compuerta de la presa y conviertan este espacio en un foco de infección para la población.
“Reconozco todo el trabajo que está llevando a cabo Aguas de Huixquilucan para seguir saneando este cuerpo de agua. Seguimos fortaleciendo los esfuerzos para cuidar la salud y el patrimonio de las y los huixquiluquenses. La atención de la presa ‘El Capulín’ es una prioridad para mi gobierno y, en la medida de nuestras atribuciones, vamos a remediar este cuerpo de agua federal”.
La presidenta municipal aseguró que dicha obra es de alta durabilidad y de fácil mantenimiento, lo que asegura su funcionamiento prolongado. Dijo que, el retiro de la basura recolectada será realizada de forma periódica por personal de Aguas de Huixquilucan, garantizando su limpieza y operación continua.
Romina Contreras Carrasco destacó que durante este año se realizaron diversas acciones para reducir los malos olores que emanan de la presa y, con ello, prevenir problemas de salud para los vecinos de la zona, como la construcción de un colector marginal de 2.5 kilómetros que conduce la totalidad de las aguas residuales de Balcones de la Herradura hasta la planta “El Capulín”, para que reciban un tratamiento y se reaprovechen, lo que evita que este fraccionamiento siga descargando en el río.
También se instaló una compuerta de control hidráulico que durante la temporada de lluvias permite regular el flujo del agua y evitar la saturación del canal marginal aguas abajo en puntos sensibles como el fraccionamiento Paseo de la Herradura.
En tanto, Víctor Manuel Báez Melo, el director de Aguas de Huixquilucan, explicó que junto con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), se trabaja en el proyecto ejecutivo para construir una nueva planta de tratamiento aguas arriba, que tenga la capacidad de conducir las aguas residuales hasta esta estructura y evitar que se descarguen directamente en el río.
Las autoridades de Huixquilucan destacaron que continúan con los protocolos de atención para reducir los malos olores que desprenden de este cuerpo de agua y, en la medida de sus atribuciones, seguirán con los trabajos de remediación integral de cuenca, para mejorar la calidad de vida de los vecinos que viven en las inmediaciones de la presa.